Error {Scarlett}

Si. Realmente esta muy desesperada como para acudir a él por ayuda. Ya me había pasado demasiadas noches en vela tratando de solucionar esto y por mucho que le daba vueltas no podía encontrar una salida. Nada de lo que hiciera parecía tener efecto en el cuerpo inerte de mi hermana y con cada segundo que pasaba sentía que la desesperanza iba haciendo presa de mi. Lo peor de todo es que sabía que si llamaba a mis padres ellos podrían encontrar la solución, pero yo era lo bastante egoísta como para evitar que ellos intervinieran, aunque claro la cuestión del tiempo jugaba en contra de esa opción...y por eso estaba aqui, dando vueltas por el sótano tras recordar que los demonios tenían ciertas habilidades en ese campo. Pensaba en las palabras que podía emplear para convencer al demonio de que me ayudara, nada me sonaba muy convincente. Con mi historial, estaba conciente que una negativa de su parte sería todo lo que recibiría de él: Nada más. Nada menos. Pero yo estaba dispuesta a implorar de ser necesario ¿De qué me valía el orgullo ahora? Solo deseaba tener a mi hermana de nuevo.

Una vez más miré el reloj, faltaban unos minutos para las cuatro y empezaba a ponerme muy ansiosa, seguramente Anthony no aparecería...suspiré pasando la mano por mis cabellos soltando un suspiro de alivio al oir pasos acercándose. Me recargué en la pared más lejana y esperé a que apareciera. Al verle olvidé por unos segundos la razón por la que me encontraba aqui, sin duda aquello que intentaba negarme a mi misma no había desaparecido como lo deseé meses atrás.Cerré los ojos un instante, debía concentrarme en algo más importante.Me aclaré la garganta con una pequeña tocecilla-Gracias por venir-Dí un paso en su dirección actuando con precaución. No me esperaba un trato amable de su parte.-Verás...vengo...quiero...-Respiré profundamente. Cuándo se me ocurrió pedir su ayuda en esto no me detuve a pensar en lo difícil que sería.-Necesito tu ayuda...estoy dispuesta a lo que sea con tal de que me ayudes-Sabía a lo que me arriesgaba la decir eso, Anthony era un demonio después de todo-...Por favor, dime que puedes hacerlo...-Rogué al final, solo al pensar en el cuerpo sin vida de mi hermana las lágrimas cayeron silenciosas por mis mejillas y la voz se me quebró por lo que callé, esperando una respuesta de su parte.

Me sentía, ridícula, impotente, tonta, frustrada, enojada conmigo misma y más. Dentro de mi la multitud de sentimientos empezaban a agobiarme, supongo que esa era la razón -o al menos quería creer eso- por la que ahora lloraba delante de Anthony. En otra situación habría hecho lo que fuera para que él no me viera así. Odiaba que me vieran llorar, y odiaba no poder contenerme en este momento! Pero es que lo de mi hermana era más de lo que podía soportar, por ella estaba dispuesta a todo y más! no me imrpotaba lo que me pidieran, si ella volvía a la vida me sentía capaz de asumir las consecuencias de todo sin problema. Me mantuve quieta, mirándolo suplicante. Aunque ya me esperaba una negativa, oirlo me lastimó más de lo que habría imaginado. Por un momento, sentí que la poca esperanza que abrigaba desaparecía...

Parpadeé una par de veces al ver que el demonio cambiaba de manera radical su comportamiento hacia mi. ¿Me estaba imaginando aquello? Imposible, podía sentir con total claridad la calidez que emanaba de su mano cuando tocó mi mejilla. ¿Acaso él dijo que iba a ayudarme? La esperanza que creía extinta empezó a renacer en mi pecho. Tardé un momento más en poder articular palabra, su cercanía tenía un efecto desconcertante.-Yo...lo siento...-Balbuceé con la voz ronca por el llanto-Es...es mi hermana...yo...-Un nuevo sollozo interrumpió mis palabras, debía serenarme si quería que él me ayudara. Las lágrimas podían esperar. Aclaré mi garganta y sostuve con firmeza su mirada-Mi hermana está muerta-Solté al fin-Necesito traerla a la vida de nuevo...Por favor, te lo ruego...ayúdame!-Supliqué una vez más, rezando interiormente para que aceptara. Estaba conciente de que le pedía demasiado...

Aquella esperanza que yo había sentido renacer hacía un minuto, flaqueaba nuevamente a causa de sus palabras. No! si él me negaba su ayuda, yo realmente no sabría a quien acudir. La angustia empezó a crecer en mi pecho nuevamente, no estaba dispuesta a rendirme tan rápido, eso jamás. Podía aceptar cualquier cosa menos perder a una de las personas que más amaba en este mundo. No, Juls iba a revivir sin importar cuanto costase, iba a sacrificar mi vida a cambio si era necesario. Retrocedí alejándome de él y encogí los hombros ante su suposición, no iba a negar algo tan evidente. Tomé un respiro muy profundo, tampoco podía rendirme sin agotar todas las posibilidades -Mira, sé que lo que pido no es sencillo. Sé que habrán consecuencias por esto, pero créeme que las asumiré sola sin rechistar, lo único que me importa es tener a Ju...Juliette... conmigo-No pude evitar que un nudo se me hiciera en la garganta al pronunciar su nombre. Hacerlo solo evocó su recuerdo, aquella palidez de su tez, ya no habían más sonrisas en su rostro...Cerré los ojos, debía enfocarme. Al final seguro y Anthony terminaba pensando que ya había perdido un tornillo, si es que no lo pensaba ya.-Por favor...ayúdame...seremos cuidadosos y no pasará nada malo...solo hazlo...-Por Dios! Acaso no podía controlarme??, pensé fastidiada conmigo misma. Los sollozos nuevamente habían entrecortado mis palabras. Siempre resistiendo el deseo de pedirle que me abrazara. Era una locura, pero intuia que de estar cerca de él mi miedo sería menor...si, estaba perdiendo la cordura sin duda...

Entendía que al ser un demonio, su punto de vista con referencia a los sentimientos y la importancia que podía tener una persona para el resto de los que aún éramos humanos, era muy diferente, pero en verdad podía importarle tan poco? Una parte de mi se resitía a creer eso de él, por alguna extraña y tonta razón que no comprendía, quería pensar que él era diferente, que de alguna manera podía mostrar un lado humano que muchos de los de su especie habían eliminado por completo de su ser. La verdad es que no sabía por qué quería que fuera distinto, o bueno...si lo sabía. Rayos!! otra vez estaba divagando en lugar de concentrarme en lo que era realmente importante.

Lo miré suplicante. Era absurdo quizás, pero confiaba en él de cierto modo por eso estaba pidiéndole esto. En cuanto a las consecuencias que le preocupaban tanto, para mi ocupaban unos lugares más abajo en mi relación de cosas en que pensar después de revivir a Juls. En mi búsqueda de información para intentar encontrar la manera de traerla de nuevo a la vida, había leido acerca de mitos sobre seres muy poderosos que podían surgir si se intentaba algo así, pero no había ninguna prueba de que eso iba a suceder realmente, y puede que estuviera siendo terriblemente egoista e imprudente...supongo que esas palabras describían bien mi comportamiento, pero nada importaba...además estaba decidida a llevar a cabo la resurrección de Juls, con o sin ayuda del demonio que tenía frente a mi...aunque preferiría que fuera con él...

Mis lágrimas no cesaron a pesar de oir su respuesta afirmativa, tal vez por el alivio de saber que podía contar con él para esto o porque llevaba ya muchos días acumulando sentimientos y hasta ahora podía desahogarse un poco. Aún la sorpresa cuando sus brazos me rodearon no detuvo mi llanto, apoyé la mejilla en su pecho y tras unos minutos en que dejé salir toda aquella frustración que sentía me aparté....no porque quisiera terminar el abrazo -eso se había sentido bien- sino que tanto llorar seguro me estaba dejando en ridículo frente a él y lo que menos quería es que se arrepintiera de ayudarme en esto.-Lamento esto...-Murmuré con la voz ronca sin atreverme a mirarle, seguro tenía la nariz roja y los ojos hinchados...bonita apariencia debía tener, pensé irónica. Me aclaré la garganta, intentando recobrar la compostura y algo de dignidad.-Y gracias por aceptar...estaré en deuda contigo el resto de mi vida-Dije en un tono formal.Sin atreverme a levantar el rostro hacia él.

Fruncí el ceño al oirle. Cómo si fuera yo la única que ponía de los nervios al otro!! Bueno, tampoco era momento para ponerme a pensar ni a discutir sobre ello. Ahora que sentía cierta calma porque él iba a ayudarme, bien podía tolerar ese comportamiento suyo, tan egocéntrico, era un engreido incurable y yo no tenía más opción que guardarme todos esos comentarios que soltaría si fuera un día cualquiera. Aunque si en verdad me iba a ayudar, yo no podía seguir pensando que era un egoísta altanero; no, el simple hecho de que aceptara y por unos pocos minutos me consolara, mostraba un lado suyo que antes no tuve oportunidad de conocer. Decir que de alguna manera yo sabía que era así, sería casi exacto, mis instintos rara vez me fallaban cuando se trataba de juzgar a las personas...quizás por eso él me imp...Corté el pensamiento de manera brusca.Siempre terminaba divagando en su presencia, pero es que sus ojos mirándome de esa forma, el contacto con su piel, su voz...todo junto tendía a dejarme la mente en blanco, vaciando cualquier cosa que tuviera en mente menos él...esto se me estaba saliendo de control. En cuanto saldara mi deuda por su ayuda, sería mejor mantenerme lejos. No necesitaba ese tipo de complicaciones en mi vida.

Aclaré una vez más mi garganta y torpemente busqué el bolso que llevaba conmigo, en cuyo interior estaban los libros que consulté, era más fácil lidiar con su presencia si me ponía en movimiento-Los he leido al revés y al derecho-Casi me los sabía de memoria-Lo que se dice sobre resurreción es muy poco, he intentado hacer la regresión con ayuda de los elementos pero...yo...bueno...creo que me desmayaba cada que lo intentaba...-Miré al suelo, me avergonzaba admitir que no podía con ese tipo de conjuros-Ammm...lo de la bruja suena bien, yo no conozco a ninguna que pueda ayudar...de todas maneras puedo seguir buscando en otros sitios...-Pasé una mano por mis cabellos-El problema es el tiempo...yo...no sé cuanto más sea posible mantener el hechizo sobre Juliette para evitar que su cuerpo...que...-No podía decir la palabra, no iba a permitir que mi hermana se fuera así. Suspiré-Debemos apresurarnos...

Incliné la cabeza ligeramente.Uhmm...lo que decía tenía cierta lógica, yo había intentado ir contra la naturaleza, era de esperar que la misma no me permitiera revivir a mi hermana. Desde ese punto de vista tenía más probabilidades de que los nuevos intentos tuvieran mejores resultados. Sostuve su mirada unos segundos, perdiéndome en ellos...era tan fácil olvidar lo demás si hacía aquello y si a eso le sumaba ese cosquilleo que provocó en mi piel su simple roce, no había mucho que mi sentido común pudiera hacer para dejar de verme como una tonta frente a él. En sus ojos percibía algo extraño, preocupación quizás? Ese descubrimiento me sorprendió gratamente. Un poco de amabilidad, algo de cooperación eso era todo lo que esperaba de él, nada más, nada menos -aunque por un momento tuviera el loco deseo de que fuera más que eso, no guardaba esperanazas en ello- Yo soy...?-Murmuré. Quería que completara aquello, queria saber que era eso que pensaba de mi que aparentemente no era tan malo como yo imaginaba.

Mis ojos no podían apartarse de los suyos, incluso si mi mente hubiera estado realmente centrada, mi cuerpo estaba como desconectado y no habría intentando movimiento alguno para alejarse. Esta situación era del todo nueva para ambos, por primera vez desde que nos conocíamos, no estábamos agrediéndonos...extraño, pero agradable. Por unos segundos contuve el aliento cuando su rostro se acercó al mío; con total claridad podía sentir su cálido aliento rozando mi piel como una caricia que estuvo a punto de arrancarme un suspiro. Como si fuera algo tan inevitable como caer terminé esbozando una pequeña sonrisa ante su rudo pedido y como respuesta a esa sonrisa encantadora, mientras el cosquilleo que sentí antes volvía con un poco más de fuerza, desconcértanome, confundiéndome...-Termina de decirlo...yo soy que?-Insistí en un susurro, incapaz de decir algo una pizca más inteligente.

Mi corazón aceleró sus latidos anticipándose a lo iba a suceder a continuación o tal vez solo por su cercanía, de cualquier forma sentía que sus latidos eran bastante audibles o al menos lo suficiente como para que alguien que estuviera a mi lado los oyera con total claridad. Contuve el aliento inconcientemente al percibir su rostro cada vez más cerca del mío y solo cuando sentí sus labios junto a los mío caí en la cuenta de que yo estaba deseando ese beso más de lo que podía a admitir alguna vez. Tras el primer contacto, mi corazón se lanzó en una carrera alocada contra mi pecho haciéndome jadear suavemente; mi cuerpo reaccionó como si fuera un ente independiente. Mis labios se movieron contra los suyos, explorandolos con un suave roce; muy conciente de su mano posada en mi cuello trasmitiendo a mi piel la tibieza de la suya acompañada a una sensación electrizante que recorrió mi columna vertebral al sentir que acercaba mi cuerpo al suyo.Un instinto natural de supervivencia me instaba a alejarme dada su naturaleza, pero este mismo quedó anulado ante la intensidad las sensaciones provocadas por sus besos.

Apenas abrí los ojos cuando se apartó por unos instantes y mis labios se curvaron en una nueva sonrisa al oirle. "Maravillosa" había dicho, eso distaba por mucho de lo que yo esperaba oir; no es que anduviera buscando un cumplido -en las circunstancias actuales, eso estaba muy lejos de lo que mi imaginación permitia- hasta me hubiera conformado con adjetivos más sencillos, sin embargo con esa sola palabra un nuevo tipo de calidez me invadía. Intenté recordar la razón por la que no podía sentirme feliz en este momento, pero sus besos impidieron que lo hiciera. Despacio desplacé una mano hasta su mejilla posándola en esta y dejando la otra apoyada en su pecho, mientras mis labios respondían a sus besos con la misma ansia...tenía la sensación de que unos besos no iban a ser suficientes...

Si tan solo se hubiera quedado en silencio, si no hubiera pronunciado esas palabras era muy posible que mi cerebro se mantendría hundido en esa especie de sopor tan agradable, sin pensar en nada, sin intentar encontrarle sentido a esto que estaba ocurriendo, sin buscar un razonamiento lógico para haber olvidado la razón por la que había recurrido a él en primer lugar. Era sencillo dejarse llevar. Una parte de mi se encontraba deseando que esto continuara, poder seguir disfrutando de la dulzura de sus labios, de sus manos sobre mi piel que provocaban suaves estremecimeintos, ser egoísta y pensar solo en mi esta vez, sin embargo aún quedaba esa parte con sentido común que me obligaba a hacer lo correcto y esta era la parte que normalmente ganaba. El sonido de su voz, y más aún el pedido que hizo me "despertó" de esa ensoñación. Lentamente esa bruma que parecía envolvernos se fué disipando, hasta que al fin mi mente se convirtió en una vorágine de pensamientos recriminatorios ¿Cómo podía estar yo haciendo esto? ¿Realmente me había olvidado de mi hermana? ¿Qué clase de persona era si me olvidaba con tanta facilidad de lo que se supone era mi prioridad hace unos instantes?

Pero mi cuerpo parecía tener otras prioridades, muy diferentes a las de mi mente, pues en cuanto empecé a alejarme apoyando ambas manos en su pecho para empujarle -jadeando aún por los besos recibidos- sentí un vacio enorme, como si estuviera dejando parte de mi en ese abrazo; mi primer instinto fué volver a acercarme pero logré reprimirlo rápidamente. Meneé la cabeza tratando de aclararme-Juls...-Murmuré con la voz ronca antes de abrir los ojos, lo primero que observé fueron sus labios. Realmente deseaba volver a sentir sus labios sobre los mios, maldición!debía controlarme! ¿Qué estaba sucediendo conmigo? Si bien me negué a mi misma el poder besarle de nuevo, no pude luchar contra el impulso de tocarle, una de mis manos voló a posarse en su mejilla nuevamente y delineando con el índice de la otra sus labios, ansiando sentirlos de nuevo-Mi hermana, tenemos que traerla de vuelta-Me sentía enferma conmigo misma por no querer alejarme de él para ponernos a trabajar en lo que me trajo aqui. Y lo que realmente me preocupaba de todo esto ¿Por qué me había permitido llegar tan lejos con él? ...pfff! no me apetecía responder a eso ahora, segura de que la respuesta solo iría a complicar más todo...